Te pierdes. Te supera. ¿Te aterroriza?
¡Y no será por no probarlo! La de veces que habrás intentado comprar bolsos chinos. O negociar con productores de bolsos en China. ¡O entablar conversaciones productivas con fabricantes de bolsos en China!
Pero, nada. No hay manera. ¡Aquello es otro mundo y por mucho que intentes encontrar “common ground”, siempre hay un problema u otro!
Y entonces desistes. ¿Te ha pasado?